El 31 de marzo de 1923 se añadieron los últimos 30 kilómetros al trazado, de 335, que pasó de transportar carbón al por mayor hasta los altos hornos a cargar al peso la esperanza de la emigración leonesa; eso fue más tarde; en la edad madura del tren que también hizo de afluente de la montaña con la capital de la provincia; el ir y venir de una circulación mítica, el paso lento de un ferrocarril eterno que terminó inmortalizado en el Cuatreros, de Deicidas.
miércoles, 12 de julio de 2023
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario