lunes, 4 de enero de 2016

Aceite Elosúa


La empresa Elosúa surge a iniciativa de un hombre, Marcelino Elosúa Herrero, el noveno de doce hijos del matrimonio entre José Ventura y Escolástica.

La infancia de Marcelino transcurre en la localidad leonesa de Prado de la Guzpeña. En 1906 viaja a Méjico donde abre un almacén en el que distribuye todo tipo de productos. Una experiencia crucial para su posterior proyecto empresarial. En Méjico se casa pero su esposa muere a los pocos años, época en la que comienza la añoranza por su país donde regresa definitivamente en 1924.


En 1927 y después de su matrimonio con una hija del almacenista asturiano Rojo Cortés opta por dedicarse a la comercialización de aceite al ser un producto de gran consumo y que en aquellos años tenía una deficitaria distribución. Nace Elosúa, SA, con un capital social de 1.100.000 pesetas.

A pesar de no conocer nada del negocio del aceite viajó hasta la provincia más productora de este producto, Jaén, para iniciar su negocio de fabricación de aceite en la localidad de Martos. Con el fin de organizar una red de abastecimiento y distribución suficientemente sólida inicia en 1930 la expansión del negocio. Para ello abre la primera sucursal en Miranda de Ebro. En 1935 compra terreno en el paseo del Malecón en León en lo que será su desembarco en la provincia con un centro de servicios centrales de distribución. En 1940 apuesta por una nueva sucursal en Lucena, pero no será hasta 1949 cuando abra su segunda fábrica de aceite en la localidad de Monte Lope Álvarez, muy cercana de la otra planta productiva de Martos, a la que se suma en 1958 la sucursal de Oviedo.

Unos años en los que la expansión de la empresa es continua y en la que se produce la constitución de diversas sociedades, así como la incorporación de sus hijos, siendo el primero en incorporarse el primogénito, Marcelino, que a partir de 1949 comenzó a colaborar con su padre en la dirección del negocio. Posteriormente se incorporaron José Manuel, en 1953, y Andrés, el más pequeño de los hermanos, en 1967. Tras la muerte del fundador en 1972 su hijo mayor ocupó la presidencia del grupo, cargo que ocupó hasta su fallecimiento, víctima de un accidente aéreo el 6 enero de 1984 en León, pasando Andrés Elosúa a ocupar la presidencia.

Mientras, Elosúa se embarcaba en un proyecto pionero, junto con otros almacenistas se integró en el grupo fundacional SPAR que supuso el primer intento para cambiar el concepto de tienda de mostrador en tienda de autoservicio. Otras novedades que introdujo Elosúa fueron, entre otras, trabajar a través de pedidos, publicidad en el punto de venta, aplicación de cursos para los empleados, puntos para las amas de casa que compraban en el grupo y luego canjeaban por regalos, etcétera. Esto sirvió de base para la posterior puesta en marcha de la venta por catálogo bajo la Sociedad Venca, S.A.

Pero Elosúa necesitaba una refinería para garantizar la calidad del producto, y para ello creó la refinería en León en 1962. Los envases eran un problema ya que el vidrio importado de Alemania y Francia tenía un tratamiento especial para lavarlos y llenarlos mecánicamente. Esto exigía altas inversiones. Para minimizar este problema, se probó el tetra-pack, pero no tuvo éxito en los hogares españoles.

La familia Elosúa se benefició en 1985 de un crédito oficial de 4.500 millones de pesetas en condiciones ventajosas (equivalía a una subvención de 2.500 millones) para la formación de un gran grupo aceitero nacional con la compra de Carbonell.Los empresarios españoles han solicitado, precisamente, verificación administrativa al Transacciones Exteriores para la venta de este 51,01% al Banco Internacional de Luxemburgo. Con esta última operación, que oficialmente asciende a sólo 1.698 millones de pesetas, el capital extranjero en el grupo aceitero superaría el 56%. Marcelino Elosúa señaló el pasado jueves ante el consejo de administración de Elosúa que no era cierto que hubiera vendido sus acciones.

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