miércoles, 12 de septiembre de 2018

Paseo por el camino del Faedo


A finales del pasado agosto hice una pequeña excursión, con mi hermano, por el camino que desde Orzonaga va hacia el Faedo y Llombera.

Por el camino de Vegaipina


Este julio pasado, de buena mañana.

Paseo por la Pontona al atardecer


El mes de julio a la tarde la temperatura es ideal para el paseo. Cerca, la ermita de Boinas.

El hórreo de Las Bodas


Cuando, en los años ochenta, el arquitecto madrileño José Luis García Grinda estudió el hórreo de Las Bodas, cerca de Boñar, para su monumental obra Arquitectura tradicional leonesa , quedó fascinado por el enorme arcaísmo de su construcción, sólo similar a otros dos, también montañeses, y datado, de forma aproximada, en el siglo XVII.

martes, 4 de septiembre de 2018

El abuelo cazaba


En el Boletín Oficial de la Provincia de León, del lunes 15 de septiembre de 1913, se da cuenta de las licencias de caza expedidas en la provincia en ese mes. En Matallana aparece registrado Juan Barrón, mi abuelo. En total 785 licencias.


domingo, 2 de septiembre de 2018

Las primeras fábricas de cerveza en León


Según la entrada de la ciudad del Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano contaba con fábricas de curtidos, mantecados, chocolate, harinas, jabón, loza, telares de lienzo, alfarerías, fundiciones de hierro y otros metales y la fábrica de productos químicos y farmaceúticos de Merino, además de los talleres del ferrocarril que construían gran número de vagones, coches, puentes y herramientas (fundada en 1869), a estas empresas se añadirá en 1900 la Papelera Leonesa. También existieron pequeñas industrias de velas, fideos, chocolates, gaseosas... Muchas de aquellas fábricas se instalaron en el entorno de la estación del ferrocarril.

El chocolate en León


El chocolate de América llegó a Europa por España. Fuimos descubridores y monopolio. Hoy el negocio y prestigio chocolatero es cosa de suizos y belgas; de sus obradores no cesan de salir excelencias, novedades y conquistas. Aquí les miramos pasmaos el alarde y pagamos su lujo. ¿Cómo es posible que nos arrebataran el decanato?

León, maragatos delante, tuvo cuatrocientas fábricas de chocolate grapadas a su historia (el marqués de Astorga tenía privilegios en la importación del cacao). ¿Y dónde están? ¿Llegó alguna a nivel suizo? ¿Qué fue de ellas?... Recordarás el olor dulzorro de las últimas en esta ciudad: Chocolates El Mago, Jualo, La Industrial Leonesa y, claro está, el chocolate espeso de la Viuda de Casimiro Díez. Se fabricaba chocolate hasta en Santa María del Páramo. Se estima que a principios del XX operaban a la vez en la provincia unos cincuenta fabricantes de chocolate, cincuenta marcas, qué frenesí. ¿Y qué les pasó? La Guerra segó a la mitad. El resto se fue durmiendo en la rentable pequeñez de su obrador familiar o de dos empleos. Algunos seguían moliendo el cacao a brazo como en el siglo XVI y era frecuente que fabricaran a la vez velas, mantecadas, escobones de urz o lo que fuera. Se conformaron con su minifundio industrial. Nunca intentarían cambiar. «Chocolate de hacer» y se acabó... y el chocolate leonés, que ya era recio de por sí, se quedó antiguo y basto, acazurrado en su taza.

Fábricas de gaseosa en León


Seguramente más de 100 fábricas de gaseosas por toda la provincia nos podrían llevar a un sesudo análisis económico de lo que fue el sector. Y habrá quien lo haga o quien ya lo ha hecho, bien lo merece, pero lo que es evidente es que los gaseoseros han protagonizado un sin fin de historias, de todo tipo, como no podía ser de otra manera en unas gentes que pateaban, pueblo a pueblo, todas las comarcas. «La gaseosa no necesitaba publicidad, llamaba por sí misma, la buscaba la gente», reconocía uno de los últimos resistentes, José Fernández, de Vega de Magaz.